Sazí es llevada a peluquería, allí perdió un ojo.

Sazi 8 dias después de la operación

Sazi, una perra de raza Freonch Poodle, que fue llevada por su dueña Jessica Espitía, a la clínica veterinaria, ubicada en la localidad de Bosa para que le realizaran labores de peluquería y limpieza.

En un mal procedimiento, la persona que tuvo a cargo esta actividad, no tuvo las precauciones necesarias y esto conllevo a que la mascota perdiera su ojo izquierdo. 

Las explicaciones que dan frente a esta situación se refieren a los nervios de la mascota y una inexactitud en como pudo haber sucedido esto.

Lamentablemente la ley que protege los animales, los tiene contemplados como objetos, (Daño en bien ajeno) y no se puede hacer mayor acción frente a estas situaciones, sin embargo se han llegado a unos acuerdos entre los propietarios de la clínica y los cuidadores de Sazí, que si bien no le devolverá su ojo, si es una reflexión para que el Congreso lleva a cabo leyes para proteger a los más indefensos, en este caso los animales. 

Por otro lado, el caso de Sazí ha despertado una excelente solidaridad en las redes sociales, hacia el respeto por los animales, sin embargo,  si bien existen personas que demuestran su apoyo, también existen otros tantos realizando amenazas de muerte, bombas y hasta ácidos. Desde esta tribuna hacemos un llamado a la reflexión y la cordura, pues si bien el caso es doloroso, no nos puede hacer perder la cabeza atacando a cualquiera de las dos partes, existen muchos animales abandonados por sus dueños en las calles, en el espacio público e inclusive encerrados en lugares, donde no reciben ningún tipo de cuidado. Apoyemos la reforma a la ley para que estos casos no se queden en la impunidad. 

 Aquí el vídeo