Por: Ruperto Tellez
Lo que hoy nos hace sonreír fueron las cosas que nos hicieron llorar ayer. Nuestras faltas de hoy también serán las alegrías del mañana.
Las personas se van, los amores se pierden en el tiempo, los problemas se solucionan. El mismo sol se va cada noche para renacer al día siguiente…. No te quedes a la mitad del camino porque adelante algo te espera.
Si pensamos que todo es pasajero miraremos con cariño lo negativo que te encamina a la perfección, y luego observaremos con felicidad el cambio de mal en bien, de tristezas en alegrías.
No podemos cambiar el mundo, ni quitar todo el dolor de la tierra, ni tener ya resueltos todos nuestros problemas, pero podemos a cada minuto mirar con ojos del amor a cada cosa. No te apures cuando no encuentres compañeros de lucha, sin lugar a dudas hay manos que sostienen las tuyas. Cree y siente en cada minuto de tu vida, deja que tu alma “VUELE” libre por los jardines hermosos de la confianza en algo superior que llega donde nuestra visión no puede alcanzar, pero sí nuestro corazón puede sentir.
Cierra los ojos por algunos minutos y deja tus pensamientos volar por senderos de paz y amor.
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